Aprendamos...

Aprender a hablar tuvo que haber sido una experiencia trascendental para cada persona en sus inicios.

Aprender a comunicarse, a interactuar, a encontrar y sobre todo a aprovechar las distintas posibilidades que nos ofrece la tecnología, es algo a lo que ahora me estoy
abriendo,esperando que resulte tan apasionante como tuvo que haber sido el proceso de aprender a hablar...

Independientemente a eso, tal vez, solo tal vez, lo que a mi me parece interesante, a vos tambien...



sábado, 15 de marzo de 2008

El país de mama y papa...


DESDE EL DIVAN


por Jorge Guinzburg...




..Entré al consultorio, me quité el piloto, lo colgué en el perchero, miré durante unos segundos cómo se iba mojando la alfombra y avancé hasta el diván


...Me senté; no estaba en condiciones de acostarme.


..Si en esa sesión no miraba a la cara a mi analista, no hubiera sido capaz de emitir una palabra. Sabía que lo que había descubierto podía cambiar el curso de mi terapia. Percibía que por primera vez estaba a punto de descifrar por qué me afectaba tanto no entender la realidad, algo que les pasa también a muchos políticos, sólo que a ellos no les importa.


..Mirándolo a los ojos, le dije a mi terapeuta: "Mi mamá y mi papá me engañaron todo el tiempo".


..Y sin dejarlo pestañear fui desarrollando el nudo de mi angustia.".


..Y no fueron mentiras así nomás.Yo puedo perdonarles que me hayan asegurado que si tomaba la sopa iba a crecer, pero no esas calumnias que afectaron mi vida para siempre."


..Con la carga adicional de saber que no estaba recordándolas todas, comencé a enumerar las que aún resonaban en mi atormentado cerebro:"Si te pasa algo en la calle, llamá a un policía, él te va a ayudar.


..Los ladrones le tienen miedo a la Policía. Juez no es cualquiera, primero tiene que demostrar su honestidad y que es el mejor en lo suyo.


..Para integrar un partido político tenés que tener la misma línea de pensamiento que el resto de tus compañeros.Si querés ganar mucha plata tenés que trabajar muy duro.


..El que roba va a la cárcel.Los periodistas tienen que ser objetivos y en ningún momento mostrar su ideología, sólo tienen que informar y eso sirve para formar.


..Si lo dijeron por la tele, es verdad.Al final siempre ganan los buenos. La Argentina es un país rico, vos plantás un palo de escoba y crece una planta, por eso acá nadie se muere de hambre.Acá no trabaja el que no quiere.Este es un país de inmigrantes, el que llega no se quiere ir más. El banco es el lugar más seguro para guardar la plata.El cliente siempre tiene razón.Si sos honesto siempre te va a ir bien en la vida.Mis derechos terminan donde comienzan los de los demás y viceversa.Los políticos son los representantes del pueblo.La escuela pública es la mejor, a las privadas van aquellos a los que no les da la cabeza para estudiar.Un presidente, cuando asume, declara su patrimonio, y cuando termina su mandato no puede tener más que cuando asumió. Después de las elecciones, el candidato que perdió se pone a disposición del que ganó para ayudarlo.Ningún país se puede inmiscuir en asuntos internos de otro.Todos los ciudadanos tienen los mismos derechos y obligaciones. Nos tienen bronca porque somos los mejores.Como se come acá no se come en ningún lado.Los países ricos ayudan a los países pobres.La esclavitud se terminó hace rato y está prohibido que los chicos trabajen. Después de trabajar toda la vida, el premio es que podés jubilarte y vivir sin laburar.


"Al llegar a ese punto, me arrepentí de verle la cara a mi terapeuta, él también estaba llorando mientras hacía añicos el retrato familiar que hasta ese día cuidaba como un tesoro.


Cuántos crecimos engañados en el país de mamá y papá.

viernes, 14 de marzo de 2008

La guerra y la paz

Por Sandra Russo


En Miss Simpatía, Sandra Bullock era una agente de policía que tenía que infiltrarse en un concurso de belleza para descubrir no sé qué cosa. Las candidatas a reina eran estereotipos de mujeres unineuronales, rubias taradas de pueblitos sureños norteamericanos de ésos en los que el día más interesante del año es Halloween. Chicas bobas pero sin maldad. Y sin ni un poco de morbo propiamente dicho. El morbo norteamericano, para el gran público, es la estupidez.Cuando tenían que hablar frente al micrófono y demostrar que no eran sólo pedazos de hembras, sino también corazones palpitantes y mentes despiertas, las candidatas coincidían en un punto: a la hora de contarle al jurado “con qué soñaban”, todas decían: “Con la paz mundial”.El morbo norteamericano, decía, para el gran público, es la estupidez. Pero en privado, entre pocos, entre líneas, en el fondo, en el patio trasero, en rigor, a juzgar por los hechos, creo, el morbo norteamericano es tremendo. No hay, y nunca hubo límites cuando, en diferentes oportunidades históricas, Estados Unidos se sintió amenazado o atraído por algo. El morbo norteamericano para manipular la realidad y convertirla en un discurso para débiles mentales es tremendo. Como es tremenda, y apabullante, la docilidad de sus agentes multiplicadores locales.Las ideas desplegadas en la cumbre de ayer por el presidente Uribe siguieron esa línea políticamente patriarcal, típica de la política exterior norteamericana, de “reservarse el derecho”, cuando no tiene ningún derecho. Sostener tímida pero indudablemente la idea de “ir a buscar al terrorismo donde estén los terroristas” es morbosamente estúpida, pero por estupideces es que han muerto millones de personas muchas veces. Por estupideces se han desatado guerras y se han instalado odios ancestrales. Esa política ya dio incontables muestras de que encubre otros móviles. Violar el espacio aéreo de otro país escudándose en que aquel a quien se buscaba asesinar era “un terrorista tenebroso” explica básicamente que la casa se reserva el derecho a calificar a la gente como “asesinable”, al espacio aéreo del país vecino como “violable” y las recomendaciones de los grupos y cumbres de países como “obviables”.Si Uribe suscribe como un buen hijo de Bush toda la idea, él, como Bush, lo diga o no, se reserva el derecho de hacer lo incorrecto y después pedir disculpas. Eso es en sí mismo una amenaza, como Estados Unidos es también una amenaza.“La paz mundial”, como repetían las aspirantes norteamericanas a reinas, no es absolutamente nada. Las rubias taradas repetían eso como quien dice soy buena, mirá qué culo que tengo. Eso dice Bush. Soy bueno, qué pena ese temita de los rehenes en Colombia, ¿era Colombia?, qué pena que lo esté por solucionar un populista, en fin, y bueno, que Uribe se pase de la raya, ja ja, la raya, y que se maten entre ellos.La paz mundial no es nada. Es apenas un bocadillo de circunstancia tan banal que puede ser repetido por aspirantes a reinas de belleza sin nada en la cabeza. Si no se tiene nada en la cabeza, bien, puede uno ponerse a hablar sobre lo lindo que sería que en el mundo reine la paz. Pero la paz regional es lo único importante en estos días. La paz regional no está en la agenda norteamericana.La paz latinoamericana, para los latinoamericanos, debería ser lo único importante en estos días. Y fue un alivio escuchar ayer al abanico de presidentes de esta nueva América latina, que salvo Colombia, no está ya acechada por organizaciones guerrilleras y se debate en procesos democráticos que buscan darse fuerzas recíprocas. Para la paz hay equipo. Puede haber laderos sueltos, pero en América latina hoy no hay vicios carnales. Hay política.

martes, 11 de marzo de 2008

Barack Obama vicotorioso en Missisipi


Ahora quedan seis semanas de campaña hasta las primarias de Pennsilvania...

Esta foto fue tomada en el Restaurante de Buck, Greenville, Missisipi, el Senador Barack Obama habia parado para desayunar y saludar a los seguidores.

viernes, 7 de marzo de 2008

Tengo un sueño




Discurso leído en las gradas del Lincoln Memorial durante la histórica Marcha sobre Washington







Estoy orgulloso de reunirme con ustedes hoy, en la que será ante la historia la mayor manifestación por la libertad en la historia de nuestro país.
Hace cien años, un gran estadounidense, cuya simbólica sombra nos cobija hoy, firmó la Proclama de la emancipación. Este trascendental decreto significó como un gran rayo de luz y de esperanza para millones de esclavos negros, chamuscados en las llamas de una marchita injusticia. Llegó como un precioso amanecer al final de una larga noche de cautiverio. Pero, cien años después, el negro aún no es libre; cien años después, la vida del negro es aún tristemente lacerada por las esposas de la segregación y las cadenas de la discriminación; cien años después, el negro vive en una isla solitaria en medio de un inmenso océano de prosperidad material; cien años después, el negro todavía languidece en las esquinas de la sociedad estadounidense y se encuentra desterrado en su propia tierra.
Por eso, hoy hemos venido aquí a dramatizar una condición vergonzosa. En cierto sentido, hemos venido a la capital de nuestro país, a cobrar un cheque. Cuando los arquitectos de nuestra república escribieron las magníficas palabras de la Constitución y de la Declaración de Independencia, firmaron un pagaré del que todo estadounidense habría de ser heredero. Este documento era la promesa de que a todos los hombres, les serían garantizados los inalienables derechos a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad.
Es obvio hoy en día, que Estados Unidos ha incumplido ese pagaré en lo que concierne a sus ciudadanos negros. En lugar de honrar esta sagrada obligación, Estados Unidos ha dado a los negros un cheque sin fondos; un cheque que ha sido devuelto con el sello de "fondos insuficientes". Pero nos rehusamos a creer que el Banco de la Justicia haya quebrado. Rehusamos creer que no haya suficientes fondos en las grandes bóvedas de la oportunidad de este país. Por eso hemos venido a cobrar este cheque; el cheque que nos colmará de las riquezas de la libertad y de la seguridad de justicia.
También hemos venido a este lugar sagrado, para recordar a Estados Unidos de América la urgencia impetuosa del ahora. Este no es el momento de tener el lujo de enfriarse o de tomar tranquilizantes de gradualismo. Ahora es el momento de hacer realidad las promesas de democracia. Ahora es el momento de salir del oscuro y desolado valle de la segregación hacia el camino soleado de la justicia racial. Ahora es el momento de hacer de la justicia una realidad para todos los hijos de Dios. Ahora es el momento de sacar a nuestro país de las arenas movedizas de la injusticia racial hacia la roca sólida de la hermandad.
Sería fatal para la nación pasar por alto la urgencia del momento y no darle la importancia a la decisión de los negros. Este verano, ardiente por el legítimo descontento de los negros, no pasará hasta que no haya un otoño vigorizante de libertad e igualdad.
1963 no es un fin, sino el principio. Y quienes tenían la esperanza de que los negros necesitaban desahogarse y ya se sentirá contentos, tendrán un rudo despertar si el país retorna a lo mismo de siempre. No habrá ni descanso ni tranquilidad en Estados Unidos hasta que a los negros se les garanticen sus derechos de ciudadanía. Los remolinos de la rebelión continuarán sacudiendo los cimientos de nuestra nación hasta que surja el esplendoroso día de la justicia.
Pero hay algo que debo decir a mi gente que aguarda en el cálido umbral que conduce al palacio de la justicia. Debemos evitar cometer actos injustos en el proceso de obtener el lugar que por derecho nos corresponde. No busquemos satisfacer nuestra sed de libertad bebiendo de la copa de la amargura y el odio. Debemos conducir para siempre nuestra lucha por el camino elevado de la dignidad y la disciplina. No debemos permitir que nuestra protesta creativa degenere en violencia física. Una y otra vez debemos elevarnos a las majestuosas alturas donde se encuentre la fuerza física con la fuerza del alma. La maravillosa nueva militancia que ha envuelto a la comunidad negra, no debe conducirnos a la desconfianza de toda la gente blanca, porque muchos de nuestros hermanos blancos, como lo evidencia su presencia aquí hoy, han llegado a comprender que su destino está unido al nuestro y su libertad está inextricablemente ligada a la nuestra. No podemos caminar solos. Y al hablar, debemos hacer la promesa de marchar siempre hacia adelante. No podemos volver atrás.
Hay quienes preguntan a los partidarios de los derechos civiles, "¿Cuándo quedarán satisfechos?"
Nunca podremos quedar satisfechos mientras nuestros cuerpos, fatigados de tanto viajar, no puedan alojarse en los moteles de las carreteras y en los hoteles de las ciudades. No podremos quedar satisfechos, mientras los negros sólo podamos trasladarnos de un gueto pequeño a un gueto más grande. Nunca podremos quedar satisfechos, mientras un negro de Misisipí no pueda votar y un negro de Nueva York considere que no hay por qué votar. No, no; no estamos satisfechos y no quedaremos satisfechos hasta que "la justicia ruede como el agua y la rectitud como una poderosa corriente".
Sé que algunos de ustedes han venido hasta aquí debido a grandes pruebas y tribulaciones. Algunos han llegado recién salidos de angostas celdas. Algunos de ustedes han llegado de sitios donde en su búsqueda de la libertad, han sido golpeados por las tormentas de la persecución y derribados por los vientos de la brutalidad policíaca. Ustedes son los veteranos del sufrimiento creativo. Continúen trabajando con la convicción de que el sufrimiento que no es merecido, es emancipador.
Regresen a Misisipí, regresen a Alabama, regresen a Georgia, regresen a Louisiana, regresen a los barrios bajos y a los guetos de nuestras ciudades del Norte, sabiendo que de alguna manera esta situación puede y será cambiada. No nos revolquemos en el valle de la desesperanza.
Hoy les digo a ustedes, amigos míos, que a pesar de las dificultades del momento, yo aún tengo un sueño. Es un sueño profundamente arraigado en el sueño "americano".
Sueño que un día esta nación se levantará y vivirá el verdadero significado de su credo: "Afirmamos que estas verdades son evidentes: que todos los hombres son creados iguales".
Sueño que un día, en las rojas colinas de Georgia, los hijos de los antiguos esclavos y los hijos de los antiguos dueños de esclavos, se puedan sentar juntos a la mesa de la hermandad.
Sueño que un día, incluso el estado de Misisipí, un estado que se sofoca con el calor de la injusticia y de la opresión, se convertirá en un oasis de libertad y justicia.
Sueño que mis cuatro hijos vivirán un día en un país en el cual no serán juzgados por el color de su piel, sino por los rasgos de su personalidad.
¡Hoy tengo un sueño!
Sueño que un día, el estado de Alabama cuyo gobernador escupe frases de interposición entre las razas y anulación de los negros, se convierta en un sitio donde los niños y niñas negras, puedan unir sus manos con las de los niños y niñas blancas y caminar unidos, como hermanos y hermanas.
¡Hoy tengo un sueño!
Sueño que algún día los valles serán cumbres, y las colinas y montañas serán llanos, los sitios más escarpados serán nivelados y los torcidos serán enderezados, y la gloria de Dios será revelada, y se unirá todo el género humano.
Esta es nuestra esperanza. Esta es la fe con la cual regreso al Sur. Con esta fe podremos esculpir de la montaña de la desesperanza una piedra de esperanza. Con esta fe podremos trasformar el sonido discordante de nuestra nación, en una hermosa sinfonía de fraternidad. Con esta fe podremos trabajar juntos, rezar juntos, luchar juntos, ir a la cárcel juntos, defender la libertad juntos, sabiendo que algún día seremos libres.
Ese será el día cuando todos los hijos de Dios podrán cantar el himno con un nuevo significado, "Mi país es tuyo. Dulce tierra de libertad, a tí te canto. Tierra de libertad donde mis antesecores murieron, tierra orgullo de los peregrinos, de cada costado de la montaña, que repique la libertad". Y si Estados Unidos ha de ser grande, esto tendrá que hacerse realidad.
Por eso, ¡que repique la libertad desde la cúspide de los montes prodigiosos de Nueva Hampshire! ¡Que repique la libertad desde las poderosas montañas de Nueva York! ¡Que repique la libertad desde las alturas de las Alleghenies de Pensilvania! ¡Que repique la libertad desde las Rocosas cubiertas de nieve en Colorado! ¡Que repique la libertad desde las sinuosas pendientes de California! Pero no sólo eso: ! ¡Que repique la libertad desde la Montaña de Piedra de Georgia! ¡Que repique la libertad desde la Montaña Lookout de Tennesse! ¡Que repique la libertad desde cada pequeña colina y montaña de Misisipí! "De cada costado de la montaña, que repique la libertad".
Cuando repique la libertad y la dejemos repicar en cada aldea y en cada caserío, en cada estado y en cada ciudad, podremos acelerar la llegada del día cuando todos los hijos de Dios, negros y blancos, judíos y cristianos, protestantes y católicos, puedan unir sus manos y cantar las palabras del viejo espiritual negro: "¡Libres al fin! ¡Libres al fin! Gracias a Dios omnipotente, ¡somos libres al fin!"

jueves, 6 de marzo de 2008

Clinton sigue en campaña gracias a sus victorias en Ohio y Texas sobre Obama



Hillary sigue viva. La senadora por Nueva York ha logrado contener su desventaja frente a su rival, Barack Obama, en los mismos niveles en los que estaba antes de las elecciones del martes. Para ello tuvo que imponerse en Texas, Ohio y Rhode Island, mientras que el senador por Illinois no pudo hacerlo más que en Vermont. El sistema proporcional que aplican los demócratas y lo ajustado de las victorias de Clinton han hecho que ésta no haya podido, realmente, darle la vuelta a la situación, sino detener una tendencia a la derrota que parecía imparable. De haber perdido, Clinton habría quedado fuera de combate. Ahora, los demócratas seguirán peleando por cada delegado mientras los republicanos, gracias a las cuatro victorias del senador por Arizona John McCain, ya tienen candidato. Washington
Hillary Clinton logró sobrevivir al «minimartes» y sigue en campaña. La senadora por Nueva York se apuntó la victoria en Texas, Ohio y Rhode Island, rompiendo así la racha de once triunfos consecutivos de su rival, el senador por Illinois Barack Obama, que sólo logró imponerse en Vermont. Sin embargo, al ser las victorias de Clinton muy ajustadas, Obama sigue manteniendo la ventaja que tenía antes del martes.
Mientras, en el bando republicano las victorias del senador por Arizona John McCain le permitieron rebasar la cifra mágica de 1.191 delegados que le da acceso a la candidatura republicana a la Casa Blanca.

En el Partido Demócrata habrán de esperar otras seis semanas para definir un poco más al futuro aspirante a presidente, ya que el 22 de abril se celebrarán en Pennsylvania (187 delegados) las últimas primarias importantes antes de la convención de agosto en Denver. Previamente se celebrarán los caucus de los estados de Wyoming (18 delegados) y Mississippi (40 delegados), que no serán determinantes.

Si bien las victorias de Clinton en las primarias de Texas (228 delegados) y Ohio (162), los dos estados más importantes de la votación del martes, permiten sobrevivir a la senadora, los resultados fueron muy ajustados y, de hecho, la victoria de Texas sabe a empate (ver información adjunta). En el Estado de la estrella solitaria Clinton obtuvo un 51 por ciento de los votos y Obama un 47 por ciento.
Pero da la casualidad de que este Estado también celebró caucus -grupos de ciudadanos que se juntan en un debate público que concluye en apoyo a uno u otro candidato-, convocatoria que ganó Obama con un 56 por ciento de los votos por un 44 para Clinton.
Ohio, la victoria más cómoda
En Ohio, la ex primera dama logró una victoria más cómoda, con un 54 por ciento por un 44 por ciento del senador por Illinois, mientras que en Rhode Island (33 delegados) la candidatura de Clinton se impuso aún más, llegando hasta el 58 por ciento frente al 40 por ciento obtenido por su rival. De los cuatro estados donde se celebraron primarias, Obama sólo consiguió la victoria en Vermont (23 delegados), con un 59% frente a un 39% de Clinton.

Obama enfatizó ayer, en un comunicado a sus seguidores al que tuvo acceso LA NUEVA ESPAÑA, que tras las primarias y caucus del martes mantiene la ventaja en delegados sobre Clinton. «Gracias a millones de personas que apoyan un cambio, lograremos la nominación por el Partido Demócrata el próximo mes de agosto en Denver», afirma la nota.

El senador da por sentado que el viaje a la nominación es largo. «Además, siempre hemos sabido lo que tenemos en contra», añade. El senador por Illinois tampoco pasa por alto los numerosos ataques de los que ha sido objeto en las pasadas semanas: «Es la clase de táctica que intenta trocar nuestra esperanza en temor», informó María José IGLESIAS.

Por su parte, Clinton continuó ayer la implacable campaña negativa contra Obama, la estrategia que parece haberle ayudado a revivir. Lejos queda ya la Hillary emotiva que a principios de enero dijo, con los ojos húmedos, que esta campaña era «muy personal» para ella, y la Hillary que a finales de febrero aseguró en un debate sentirse «orgullosa» de competir por la Casa Blanca con «Barack».

Ayer, la ex primera dama aseguró: «Esto no ha hecho más que empezar», y recordó que la victoria en Ohio -aunque en las presidenciales del mes de noviembre- ha sido siempre, según las estadísticas, condición imprescindible para llegar a la Casa Blanca. No obstante, Clinton lanzó un guiño a Obama, al no descartar que éste pudiera acompañarla en el tándem presidencial. «Por supuesto, tenemos que decidir quién encabezará la fórmula», añadió.
En el bando republicano, las cosas están tan claras que tras el cuádruple triunfo de McCain -y el consiguiente abandono del último rival que le quedaba, Mike Huckabee-, el senador por Arizona fue recibido ayer a comer por el presidente Bush en la Casa Blanca: «Va a ser el presidente que traerá la determinación para derrotar al enemigo», afirmó un Bush que hasta ahora ha estado en las antípodas, dentro del partido republicano, de quien aspira a sucederle.

domingo, 2 de marzo de 2008


Se subió con su mujer Michelle y sus dos hijas. Y partió apelando a la historia en lo que fue calificado después como uno de sus más brillantes discursos, con ecos de Martin Luther King y de su propia intervención fundacional, en la Convención Nacional Demócrata de 2004. Fue un discurso emotivo pero a la vez estratégicamente impecable, coincidieron los analistas de CNN.
"Dijeron que este día nunca llegaría. Dijeron que nuestras apuestas eran demasiado altas. Que este país estaba demasiado dividido", comenzó diciendo. "Esta noche de enero ustedes han hecho lo que los escépticos habían dicho que no podíamos hacer. Ustedes han hecho lo que el estado de New Hampshire puede hacer en 5 días más. Y lo que Estados Unidos puede hacer en este nuevo año. En filas de escuelas e iglesias, en pequeños pueblos y grandes ciudades, demócratas, republicanos e independientes se juntaron para decir que somos una sola nación, un pueblo que dice que el momento del cambio ha llegado", siguió.
Su tono nacionalista (no confundir con "patriotero") fue quizás su más inteligente énfasis: Obama destaca que él no es cambio por el cambio, sino que es EL cambio que el país necesita, ese que consiste en una unidad nacional antes impensada. De hecho aludió a su frase de 2004, cuando proclamó que no existía una nación de estados azules y rojos (como se llama a los estados donde ganan los Demócratas y los Republicanos, respectivamente), sino una nación de Estados Unidos de América. "Así es como ganaremos en noviembre y enfrentaremos los desafios de nuestra nación", complementó.
Luego capitalizó otra de las palabras clave de su campaña: esperanza (su último libro se llama "La audacia de la esperanza"). "Estamos eligiendo esperanza", dijo. "Eligiendo unidad sobre división".
Luego, elegantemente, dejó caer el peso de la historia. "A veces, sólo a veces, hay noches como ésta. Noches que años después, cuando hayamos logrado los cambios en los que todos creemos, recordaremos. Cuando nuestros hijos hayan heredado un planeta más limpio y un país menos dividido, más unido, ustedes mirarán esta noche y verán que fue el momento en que todo empezó", dijo. "Que este fue el momento en el que lo improbable fue inevitable".
Y como todo tiene nombre y apellido, habló de su propia biografía, con todo lo que implica en pocas líneas. "La esperanza es lo que me trajo acá. Es lo que trajo a mi padre de Kenya y a mi madre de Kansas, en una historia que sólo puede suceder en los Estados Unidos de América".
Barack Obama nunca menciona la raza en su campaña. Pero sabe jugar esa carta. Como destacó el analista David Gergen en CNN, en su discurso Obama dijo sutilmente: "si puedo vencer la barrera entre blancos y negros, puedo vencer la de republicanos y demócratas" (para Gergen el de Obama fue un discurso "memorable").
Es esa unidad lo que justamente puede hacerlo un candidato sólido para las elecciones generales de noviembre -algo que los Demócratas necesitan creer para elegirlo-: es lo que le permitirá reclutar nuevos votantes a su partido, no darse vuelta con los que ya existen. La alta participación y el favoritismo en la juventud que votó esta noche en Iowa le dan la razón en eso. En 2004 fueron 125.000 los simpatizantes demócratas de ese estado que participaron en el caucus. Esta vez, fueron más de 239.000.
Con este mensaje, además, le está dejando la pista aún más difícil a Hillary Clinton con vistas a las primarias del próximo martes en New Hampshire: "Hillary tendrá que demostrar que ella no es TAN divisiva", comentó en CNN el biógrafo de la senadora y legendario periodista Carl Bernstein (su socio en la historia de Watergate, Bob Woodward, se manifestó "impactado" por el discurso de Obama en el show de Larry King)
Los análisis se siguen escribiendo, y los motores para New Hampshire se siguen calentando. Recién se ha confirmado que John Edwards ha terminado segundo con un 30% y Hillary Clinton tercera con un 29%. Además, se ha producido una segunda deserción:
el senador Joe Biden ha dejado la carrera, uniéndose a Chris Dodd en la retirada.
Ya es viernes, el primer día del paréntesis entre Iowa y New Hampshire. El fin de semana habrá debates televisados en ambos partidos, y podremos ver cómo los candidatos tratan de capitalizar, o superar, su momento.


"La gente no hace amigos, los reconoce"

Autor: Vinicius de Morais

Tengo amigos que no saben cuánto son mis amigos.
No perciben el amor que les profeso y la absoluta necesidad que tengo de ellos.
A algunos de ellos no los frecuento, me basta saber que ellos existen.
Esta mera condición me llena de coraje para seguir en frente de la vida.
Más porque no los frecuento con asiduidad, no les puedo decir cuánto gusto de ellos.
Ellos no lo creerían.
Muchos de ellos están leyendo esta crónica y no saben, que están incluidos en la sagrada relación de mis amigos.
Mas, es delicioso que yo sepa que los estimo aunque no se los diga y no los frecuente.
Y a veces cuando los frecuento, noto que ellos no tienen noción de que me son necesarios, de cómo son indispensables a mi equilibrio vital, porque ellos hacen parte del mundo que yo trémulamente, construí y se tornaran fundadores de mi encanto por la vida.
Si uno de ellos muriera, yo quedaría torcido para un lado. Si todos ellos murieran yo me desmoronaría!
Es por eso que, yo rezo por su vida... y me avergüenzo, porque esta suplica esta en síntesis, dirigida a mi bienestar.
Ella es tal ves fruto de mi egoísmo
A veces, me sumerjo en pensamientos sobre algunos de ellos.
Cuando viajo y estoy delante de lugares maravillosos, me cae alguna lágrima porque no están junto a mi, compartiendo aquel placer.
Si alguna cosa me consume y me envejece, es que la rueda furiosa de la vida no me permite estar siempre al lado, habitando conmigo, andando conmigo, hablando conmigo, de todos mis amigos, y, principalmente, los que tal vez nunca vayan saber que son mis amigos.